Al menos para nosotros era uno de nuestros pilares, quizas no nos transmitio mucho sobre cuestiones tecnicas u organologicas, pero Enrique por encima de todo fue el gran custodiador, coleccionista y enamorado de la música procesional y sobre todo de la de capilla, no podremos imaginarnos igual hasta que pase un tiempo la importancia de su legado.
Enrique fue uno de los privilegiados obreros de la música trabajando en torno a una de sus mayores aficiones que no solo le trajo alegrias pues tambien suele traer sin savores.
Desde este humilde blog no encontramos palabras ni música para poder expresar la pena por tan enorme perdida, posiblemente el hubiera escogido para decirnos adios alguna marcha de sus admirados Borrego, Farfán, Pedro Braña o incluso alguna de las capillas de su padre.
"Por ello en tu camino hacia el golgota esperamos que donde quieras que vayas siempre te suenen campanillas de caridad, junto a esa Virgen que hoy tambien llora, por ese hijo que tanta música le brindo".
Desde aqui queremos mandar a su familia, y sus seres queridos un fuerte abrazo lleno de cariño y fuerza para llevar la perdida y la falta de Enrique entre nosotros.
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